Los aceites esenciales tienen una variedad de usos y beneficios para nuestra salud y vida diaria. Acá, te contamos un poco sobre ellas y cómo incluirlas en tu rutina.
Aceite esencial y su uso
Los aceites esenciales son creados a través de la destilación con agua o con vapor de alguna parte de una planta, que puede ser su tallo, su flor o incluso su semilla, con el fin de extraer los elementos o compuestos más importantes de una planta, incluyendo su aroma.
Su uso debe ser moderado, pero es común emplearlos en áreas como la aromaterapia o las infusiones. Al ser concentrados, su uso en exceso podría ser dañino, ya que le estaríamos entregando al cuerpo una dosis demasiada alta de compuestos muy específicos.
Los aceites pueden cumplir diversas funciones y usos, según su origen. Algunas de estas son:
Sueño
Algunos de estos aceites tienen propiedades sedativas. En ese sentido, lo que hace el aceite esencial es inducir el sueño, relajando tu sistema nervioso. Muy útil para personas que experimentan ansiedad y trastornos del sueño tales como insomnio.
Entre los aceites más populares con estas propiedades encontramos la lavanda, la manzanilla, el ylang ylang y la bergamota. Para utilizarlos, debes inhalar un poco del aceite antes de dormir o disolver muy pocas gotas en abundante agua.
Desintoxicar
Varios aceites esenciales promueven la desintoxicación del cuerpo. En cuanto al efecto en el cuerpo, cumplen una función diurética, de tal forma que se incrementa la expulsión de toxinas con las que vivimos en el día a día, además de facilitar la digestión y transformar los elementos que no se metabolizan con facilidad.
En el hogar, los aceites, al eliminar toxinas, reducen el nivel de contaminación en los distintos espacios, ya sean elementos patógenos o toxinas que incluso pueden traer los artículos clásicos de limpieza.
Algunos de estos aceites son el limón, eucalipto, pimienta y canela.
Ayuda con alivio
La aromaterapia ha comprobado ser eficiente al momento de reducir dolores. Muchos aceites son usados para aliviar, ya sea mediante su inhalación o el uso tópico en zonas con alta irrigación sanguínea que fomenten la absorción de los componentes del aceite.
Con respecto a la migraña o dolores de cabeza, los aceites esenciales buscan llegar al provocante del problema, más que a taparlo; es decir, no busca anestesiar, si no que sanar el sistema.
Los aceites más populares para aliviar son la lavanda, pimienta, eucaliptus y el romero. Estos pueden aplicarse directamente en las zonas afectadas o en el caso de dolores de cabeza, inhalar un poco de cada una.
Estrés y ansiedad
Uno de los usos más populares de los aceites es para tratar el estrés y la ansiedad. Gracias a sus propiedades sedantes y calmantes, ayudan a reducir los pensamientos negativos. Estos aceites han demostrado ser efectivos sobre todo en personas con depresión o que han estado bajo mucha presión o situaciones traumáticas.
Los aceites que mejor cumplen esta función son la lavanda, bergamota, naranja y rosa.
Existe una infinidad de aceites esenciales, cada una con sus características y propiedades. Ahora que conoces un poco más de ellas, busca la que más te sirva y utilízala en tu rutina y vive sus beneficios, sin olvidar que requieren un uso constante para sentir sus efectos.
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